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Regional

Cambio climático amenaza la gastronomía de Zapotitlán Salinas; analizan vedas para proteger especies

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Por ejemplo, Antonio Díaz, un restaurantero local, expresa la preocupación de la comunidad por la situación, destacando los esfuerzos para proteger a los insectos mediante el uso moderado en los platillos.

Miriam Rodríguez

El impacto del cambio climático se resiente de manera contundente en Zapotitlán Salinas, municipio que forma parte de la Reserva de la Biosfera Tehuacán – Cuicatlán, donde la producción de flores, frutas e insectos comestibles comenzó a sufrir estragos significativos. Ante esta preocupante situación, se considera la instrumentación de vedas para evitar la extinción de estas especies vitales para la gastronomía local.

Guías turísticos y representantes de restaurantes del municipio alertaron sobre la disminución alarmante de las lluvias durante los últimos cinco años, con apenas tres eventos significativos durante la temporada, y en momentos fuera de lo habitual. Esta alteración climática ha afectado gravemente la producción natural de especies endémicas en la región, especialmente la tetecha y el garambullo, así como diversos insectos comestibles como el cuchama, cocopache, pochocuil, atexcal y condoche, que dependen de cactus, mezquites y agaves para su existencia.

Antonio Díaz, un restaurantero local, expresa la preocupación de la comunidad por la situación, destacando los esfuerzos para proteger a los insectos mediante el uso moderado en los platillos. La población de insectos ha disminuido en un 30 por ciento en los últimos tres años, lo que ha complicado su recolección y ha aumentado el costo del litro hasta alcanzar los 700 pesos.

En cuanto a la tetecha, se ha señalado que esta especie florece a temperaturas de 35 grados centígrados, lo que ha permitido mantener su producción hasta ahora. Sin embargo, existe la preocupación de que con el continuo aumento de las temperaturas, estas especies puedan extinguirse en un plazo de cinco a diez años, privando a las futuras generaciones de su riqueza gastronómica y cultural.

En respuesta a esta crisis, se está considerando la implementación de vedas para regular el corte de estas especies y garantizar un aprovechamiento sustentable que permita su conservación a largo plazo.