Manifestantes nuevamente saquearon tiendas, volcaron automóviles, intentaron incendiar una comisaria, entre otras acciones; la tercera noche de disturbios dejó saldo de 151 personas detenidas.
Redacción
Las protestas en Países Bajos contra las medidas para evitar la propagación del Coronavirus se tornaron violentas en varias ciudades, después que el país instaurara un toque de queda nocturno el sábado 23 de enero.
Ayer, lunes 25 de enero, tercera noche de disturbios, dejó 151 detenciones y se registraron saqueos y fuegos artificiales en varias localidades.
Manifestantes nuevamente saquearon tiendas, volcaron automóviles, intentaron incendiar una comisaria, entre otras acciones.
El primer ministro holandés, Mark Rutte, calificó las protestas de “violencia criminal”.
“A partir del 23 de enero, entrará en vigor un toque de queda de las 9 de la noche hasta las 4:30 de la mañana. Esta fuerte medida tiene como objetivo garantizar que se reúnan menos personas. Así es como prevenimos la propagación del coronavirus”, anunciaron las autoridades.
