En muchos establecimientos, se destina un porcentaje de las propinas para distribuir entre el personal que no trabaja directamente en el servicio de mesa, mientras que el resto se divide entre los meseros y meseras.
Pilar Pérez
Las propinas en los restaurantes son un tema clave tanto para los comensales como para los trabajadores del sector. Estos ingresos adicionales representan un apoyo significativo para el personal de servicio, que a menudo depende de ellos para complementar sus salarios.
Según la práctica común, se sugiere dejar una propina del 10 por ciento del total de la cuenta como muestra de aprecio por el servicio recibido, aunque esta cantidad puede variar según la experiencia del cliente.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que las propinas no solo benefician a los meseros, sino que también respaldan a una cadena de empleados que contribuyen al funcionamiento del restaurante, desde los cocineros hasta el personal de limpieza.
En muchos establecimientos, se destina un porcentaje de las propinas para distribuir entre el personal que no trabaja directamente en el servicio de mesa, mientras que el resto se divide entre los meseros y meseras.
Esta práctica refleja la importancia económica de las propinas dentro de la industria restaurantera y su impacto en la vida de quienes trabajan en ella.
