En esta temporada, la tradición católica sugiere el ayuno, especialmente los miércoles de ceniza y los viernes, reduciendo la ingesta de alimentos y evitando el consumo de carne de puerco.
David Portillo
Con la llegada del miércoles de ceniza, se marca el inicio de la cuaresma en la tradición católica. Decenas de feligreses se congregaron este 14 de febrero en la Catedral de Puebla para participar en la celebración religiosa y recibir la imposición del polvillo.
Este periodo de 40 días que precede a la Semana Santa, adquiere una particularidad este año al ser bisiesto, extendiéndose a 41 días hasta el jueves santo, con la pascua que culmina el Domingo de Resurrección, el 31 de marzo.
Durante la cuaresma, la tradición católica sugiere el ayuno, especialmente los miércoles de ceniza y los viernes, reduciendo la ingesta de alimentos y evitando el consumo de carne de puerco. Este precepto es obligatorio para personas entre los 18 y 60 años, mientras que los enfermos quedan exentos.
En este 14 de febrero, se llevarán a cabo misas cada hora en diversos templos de la capital, donde se realizará la imposición de la ceniza. Cabe recordar que este gesto, que consiste en aplicar ceniza en la frente, simboliza la penitencia y la humildad, un acto de perdón y súplica ante Dios por los pecados.
La ceniza utilizada se obtiene quemando las palmas benditas del Domingo de Ramos del año anterior, junto con estampas, misales y vestiduras litúrgicas desgastadas, en un proceso que refleja el ciclo litúrgico de renovación espiritual.
