Los expertos afirmaron que la gran mayoría de estos incidentes tienen su origen en tensiones políticas, socioeconómicas, étnicas, raciales, religiosas o de otro tipo propias de situaciones nacionales o regionales concretas.
Redacción
Un amplio grupo de expertos de la ONU en derechos humanos expresaron hoy su preocupación ante la “brutalidad policial desenfrenada” que se produce “contra manifestantes pacíficos en todo el mundo”, y advirtieron a los Estados del grave peligro que este tipo de abusos supone para las garantías fundamentales.
Los especialistas destacaron que durante los últimos meses y años ha crecido “el uso de la fuerza excesiva, la brutalidad policial y otras formas de trato cruel, inhumano o degradante, junto a las detenciones arbitrarias”.
“Esta tendencia, que a menudo se extiende a los periodistas que cubren las protestas, ha provocado innumerables muertes y lesiones, a menudo agravadas por la tortura, la violencia sexual, la detención arbitraria y la desaparición forzada, y ha intimidado, traumatizado y antagonizado a grandes segmentos de la sociedad en todo el mundo”, señalaron.
Los expertos afirmaron que la gran mayoría de estos incidentes tienen su origen en tensiones políticas, socioeconómicas, étnicas, raciales, religiosas o de otro tipo propias de situaciones nacionales o regionales concretas.
“Lo más preocupante es que, en todas las regiones y contextos, estos actos de violencia y abuso han sido a menudo alentados por discursos divisivos, discriminatorios e incendiarios difundidos o consentidos por los líderes políticos, las autoridades locales y parte de los medios de comunicación, y por la consiguiente atmósfera de casi total impunidad para los autores.”
Por ello, instaron a los gobiernos “a no dilapidar inútilmente la confianza de su pueblo, a abstenerse de toda violencia injustificada, coerción y división, y a priorizar y promover el diálogo, la tolerancia y la diversidad en aras del interés público común de todos”.
