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Internacional

El “León de Herat”, señor de la guerra afgano, se rinde ante los talibanes

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Los insurgentes publicaron un video del viejo señor de la guerra. En éste dice: “deben tratar bien a la gente y ésta debe demostrar buenos sentimientos hacia ellos, para que puedan convivir juntos de manera exitosa”. 

AFP

Herat, Afganistán.- Hace solo un mes, el “León de Herat”, apodo de Ismail Khan, uno de los señores de la guerra más célebres de Afganistán, prometió defender su tierra contra la ofensiva de los talibanes, pidiendo a su gente que se uniera al combate. Pero Herat cayó finalmente y su jefe se rindió ante los insurgentes. 

Khan, de 75 años, mantuvo durante décadas el poder sobre Herat, la tercera ciudad más grande del país, ubicada en el oeste, cuyo valor estratégico estriba en particular en su proximidad con Irán. 

Su suerte permanecía incierta el jueves, horas después de la toma de Herat, que estuvo rodeada durante varios días por los talibanes. 

Éstos después afirmaron que Ismail Khan se había rendido junto a sus hombres y que su seguridad estaba garantizada. Jamal Naser Habibi, su portavoz, confirmó aue habían llegado a un acuerdo y que el líder sería “devuelto a su residencia”.

Los insurgentes publicaron un video del viejo señor de la guerra. En éste dice:“deben tratar bien a la gente y ésta debe demostrar buenos sentimientos hacia ellos, para que puedan convivir juntos de manera exitosa”. 

“Esperamos que todos nuestros hermanos instauren una atmósfera pacífica y pongan fin a estos combates, y que la paz y la estabilidad sean restablecidas en Afganistán”, añadió. 

Horas después tras la caída de la ciudad, un grupo talibán derribó la bandera afgana que flameaba sobre una comisaría. Algunos se habían trepado al capó de un ‘Humvee’, vehículo militar todoterreno abandonado por las tropas fieles al gobierno. Uno de ellos, con un lanzacohetes colgando de un hombro, sonreía ante una cámara. 

El tráfico de autos y bicicletas parecía normal. La bandera blanca talibana ondeaba en un poste adosado a una motocicleta.

CARACTER INSUMISO

Al igual que en otras ciudades tomadas en esta semana por los insurgentes, las autoridades afirman que se rindieron para evitar un baño de sangre entre los civiles. 

Los talibanes “se apoderaron de todo”, indicó a la AFP un alto funcionario de seguridad, añadiendo que las fuerzas afganas se retiraron, “para evitar más daños a la ciudad”, hacia una base militar ubicada en Guzara, distrito vecino. 

La nutrida milicia de Khan había logrado una serie de éxitos militares ante los talibanes cuando estos islamistas radicales tomaron el poder en la década de 1990. Pero, después se vio obligado a huir a Irán junto a miles de sus hombres. 

Dos años más tarde, el líder guerrero fue capturado por los insurgentes cuando regresó con el objetivo de organizar un levantamiento. Logró escapar de prisión en 1999, y todavía se encontraba en libertad cuando las fuerzas estadounidenses ocuparon el país, en 2001.

El mes pasado, el viejo “León” daba la impresión de no haber perdido para nada su carácter rebelde y señaló ante periodistas: “con la ayuda de Dios, pronto estaremos en la primera línea y cambiaremos la situación”. 

“Esperamos que tanto los hombres como las mujeres de Herat decidan en estos momentos apoyar al frente de la resistencia para defender su libertad y salvar su honor”, añadió. 

Imputando al gobierno la responsabilidad del rápido deterioro de la situación, exhortó a los militares a mostrar mayor firmeza y a “todas las fuerzas de seguridad, a resistir con valentía”. 

Los talibanes, que en estos días han logrado una serie de conquistas clave, también se apoderaron, la víspera por la noche, de la segunda ciudad más grande del país, Kandahar, y este viernes se aproximaban a la capital Kabul. Actualmente controlan la mayor parte de ciudades y territorios del norte, oeste y sur afganos.

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© Agence France-Presse