Dos mexicanos levantan la mano

En el fútbol europeo destacó el examericanista, Raúl Alonso Jiménez; en el mundo del automovilismo, brilló Sergio Pérez. Son dos mexicanos que ya han hecho huesos viejos en sus respectivos deportes

Antonio Abascal

Raúl Alonso Jiménez y Sergio Pérez brillaron intensamente este fin de semana en Europa; el primero lo hizo al anotar de penal para que el Wolverhampton derrotara 3-0 al Everton y siguiera en la pelea por alcanzar la Champions League, mientras que el piloto de Racing Point remontó 11 posiciones para ubicarse en el sexto puesto del Gran Premio de Estiria, ser nombrado el piloto del día y dar la impresión, otra vez, de que incluso pudo colocarse en un mejor lugar sólo que el roce con Albon generó daños en su coche que lo llevaron a perder velocidad.

Dos mexicanos que ya han hecho huesos viejos en su deporte dentro de Europa y que para ello han trabajado mucho sin recibir los grandes reflectores que otros han tenido en su paso por algún equipo del viejo continente.

El examericanista ha sido titular en 34 partidos, lleva 16 goles y ha dado seis pases para gol con lo cual se codea con jugadores con grandes blasones; cabe destacar que estos 16 goles significan ya una marca para él ya que la campaña pasada anotó 13 y en el tema de las asistencias está a una de igualar su registro de hace un año cuando dio 7 pases para gol. Jiménez explotó en el Wolverhampton, un equipo bien dirigido por Nuno y que gusta de jugar al contragolpe con lo cual se han potenciado las cualidades del canterano americanista, cualidades que ya mostraba en el futbol mexicano.

Sus 16 goles lo tienen igualado con Sadio Mané del Liverpool y con Sergio Agüero del Manchester City, lejos de los 23 del líder Jamie Vardy del Leicester, pero en cuanto a las jugadas productivas para su equipo, disparos a gol y disparos a puerta es uno de los punteros en la que para muchos es la mejor liga del mundo. Jiménez vive su sexta temporada en Europa tras su paso por el Atlético de Madrid donde no pudo rendir y gozó de pocos minutos por parte de Diego Simeone, en el Benfica estuvo tres campañas en las que cumplió anotando goles importantes en un rol de revulsivo y su explosión se ha dado en el Wolverhampton donde en dos temporadas ya suma 29 goles para convertirse en el goleador histórico del club en Liga Premier ya que Steven Fletcher anotó 22.  De manera general, el jugador que más goles consiguió para los Wolves fue Jimmy Murray quien en 273 partidos anotó 156 goles pero en varias divisiones.

Ahora bien, la explosión del delantero mexicano se ha debido a varios factores: Su madurez personal, su ahínco por triunfar en Europa y no desanimarse tras la complicada etapa en el Atlético y el rol de revulsivo en el Benfica, sus propias cualidades como futbolista que ya lo habían llevado a destacar en el América, el club que lo desarrolló desde fuerzas básicas, y desde su llegada a la Premier ha encontrado un técnico que lo pidió, que le ha dado confianza y ha diseñado un sistema de juego que ha construido un equipo donde Jiménez es una pieza fundamental ya que finaliza el engranaje en el que también son muy importantes jugadores portugueses como Joao Moutinho o Diego Jota, así como el español, Adama Traoré quienes se entienden a la perfección con su centro delantero. Ese ecosistema que ha creado Nuno es el que ha permitido que Jiménez brille y se convierta en un ídolo en Inglaterra, pero en otro club más grande ese ecosistema no necesariamente se repetiría y sería un nuevo comienzo.

El Wolverhampton  no es una potencia en la Liga Premier, pero cuenta con un proyecto deportivo, algo de lo que carecen en este momento algunos grandes, de hecho, esta misma campaña el equipo naranja puede ganar la Europa League para lo cual deberá jugar la vuelta de octavos ante el Olimpiacos, en una eliminatoria que tiene ventaja ya que sacó un empate a uno de territorio griego, luego tendía que enfrentarse al ganador de la eliminatoria Sevilla vs Roma y en semifinales podría vivir un hipotético enfrentamiento ante el Manchester United. De la misma forma, la escuadra de Raúl Jiménez es sexta en la actual Liga Premier a tres puntos del Manchester United (con un partido menos) en la lucha por ingresar a la Europa League 2020-2021 y a cuatro del Leicester para clasificar a la Champions de la próxima temporada, cuando faltan tres partidos para cerrar la competencia.

Raúl Jiménez está en el mejor futbol para desarrollarse como un futbolista importante, en un sistema que le viene a él, en un equipo que funciona como tal; no necesita fichar para la Juventus donde tendría un rol secundario o para el Manchester United que todavía parece ir a la deriva, más allá de que tras el regreso del confinamiento haya encontrado un mejor funcionamiento de la mano de jugadores jóvenes.

“Checo” Pérez

El otro mexicano que brilló este fin de semana fue Sergio Pérez en la Fórmula Uno. Tras el Gran Premio de Estiria, está en el quinto lugar de la clasificación de pilotos al sumar dos sextos lugares en tierras austríacas donde la gran conclusión es que el Racing Point es competitivo y puede dar alguna sorpresa. Pérez está por encima de Max Verstappen y Carlos Sainz; por debajo del líder, Valteri Bottas, de Lewis Hamilton, de Lando Norris y está a dos puntos de Charles Leclerc de Ferrari. El fin de semana del 6 de julio un error en la estrategia del equipo privó al mexicano de un pódium y ayer se sobrepuso a una mala calificación que lo había mandado al puesto 17 para finalizar en sexto lugar con otro incidente que evitó que el auto llegara a tope a las últimas vueltas, porque hubo un momento que parecía que podía luchar por el tercer lugar.

De cualquier forma, Pérez siempre ha mostrado condiciones ya que es un buen piloto, pero en ocasiones la escudería no le ha podido dar un auto competitivo, lo que ahora parece ha logrado y entonces cabrá esperar más actuaciones destacadas como la de ayer donde fue nombrado como el piloto del día y donde incluso logró un récord de vuelta más rápida. La trayectoria de Sergio Pérez en Fórmula Uno ha sido muy llamativa y también ha demostrado capacidad para sobreponerse a las dificultades, sobre todo cuando cambió de equipo y dejó Sauber para fichar con una McLaren que presumía un pasado glorioso, pero que en ese momento no tenía pies y cabeza en lo deportivo.

Ambos mexicanos han sabido esperar su oportunidad en el máximo nivel, ambos han hecho del tesón y del trabajo sus mejores virtudes, ambos no han necesitado de muchos reflectores para ganarse el respeto el viejo continente, pero su historia tiene otro punto en común: Ambos necesitan de un  equipo que los ayude a mostrar sus virtudes y en ambos casos ahora están en escuadras competitivas que saben explotar lo mejor de estos deportistas mexicanos; ambos no necesitaron de equipos de gran lustre para mostrar sus cualidades, lo que necesitan es de un adecuado trabajo, de la confianza de los hombres que toman decisiones y una vez que todos estos factores se suman, tanto Pérez como Jiménez brillan con luz propia.