La réplica a escala tiene una altura aproximada de 11.5 centímetros y un ancho de 120 centímetros, lo que permite apreciar los minuciosos detalles que hacen que esta obra sea excepcional.
Juan Pablo Ramírez
Desde hace más de un cuarto de siglo, el talentoso artista Juan Carlos Rodriguez Meyo ha estado inmortalizando la belleza de Puebla a escala.
Su pasión y dedicación lo han llevado a desarrollar proyectos que incluyen algunos de los íconos más emblemáticos del estado, como el Templo de San Francisco, la Iglesia de los Remedios de Cholula, kioscos, monumentos, y mucho más.
A lo largo de su prolífica carrera, Rodriguez Meyo ha creado más de 350 piezas, siendo su obra más reciente una impresionante réplica a escala del Estado de Cuauhtémoc de Puebla.
Este proyecto monumental le demandó incansables noches y días de trabajo durante más de cuatro meses. Cada detalle y medida exacta han sido cuidadosamente considerados para lograr una obra maestra que rinde homenaje a la herencia arquitectónica y cultural de Puebla.
El uso de diversos materiales, como papel corrugado, madera balsa, acetato, y otros elementos, da vida a estas creaciones.
La réplica a escala tiene una altura aproximada de 11.5 centímetros y un ancho de 120 centímetros, lo que permite apreciar los minuciosos detalles que hacen que esta obra sea excepcional.
Para aumentar su realismo, el artista ha instalado iluminación artificial dentro de la estructura, lo que añade un toque de magia a cada pieza. Esta obra no solo es un tributo a la grandeza de Puebla, sino también un testimonio del talento y dedicación de Juan Carlos Rodriguez Meyo, quien ha dejado una huella indeleble en el mundo del arte y la cultura de la región.
