Las casas de empeño exigen identificación oficial y comprobante de domicilio para prevenir fraudes y recibir artículos robados.
Adan Morales
La tradicional cuesta de enero se hace sentir en las casas de empeño de la Ciudad de Puebla, donde alhajas y teléfonos celulares son los objetos más comunes que las y los poblanos dejan como garantía para obtener dinero en efectivo. Este fenómeno, que se intensifica tras los gastos de las fiestas decembrinas, ha provocado que muchas personas recurran a los préstamos prendarios como una alternativa para hacer frente a los gastos al inicio del nuevo año.
En las calles del Centro Histórico y del primer cuadro de la capital poblana, se observa una importante afluencia de familias que visitan las casas de empeño para buscar la mejor opción para obtener un crédito. La mayoría de los solicitantes busca préstamos que van desde los mil hasta los 2 mil pesos, dejando como garantía alhajas, relojes, electrodomésticos, equipos electrónicos, autos y motocicletas.
Para evitar fraudes y garantizar la seguridad tanto de los clientes como de las casas de empeño, las empresas de este sector exigen ciertos requisitos antes de aceptar cualquier artículo: identificación oficial del portador y comprobante de domicilio, con el fin de evitar la introducción de productos robados.
Ante esta situación, se recomienda a los interesados comparar las opciones que ofrecen las distintas casas de empeño, prestando especial atención a las tasas de interés y a los plazos establecidos para la recuperación de los objetos empeñados.
