Citando a fuentes ucranianas, el director del OIEA, Mariano Grossi, explicó que los reactores de la central no sufrieron daños y que tampoco se produjeron emisiones radioactivas.
Redacción
Tras participar el fin de semana en la ceremonia del 77º aniversario del bombardeo atómico de la ciudad japonesa de Hiroshima, António Guterres, titular de la Organización de las Naciones Unidas indicó hoy en rueda de prensa en Tokio que “cualquier ataque a una planta nuclear es un acto suicida”.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, se hizo eco de las recientes declaraciones del director del Organismo Internacional de Energía Atómica que alertó sobre las consecuencias del bombardeo que sufrió el pasado viernes la central nuclear ucraniana de Zaporizhzya.
Declaró que espera que esos ataques terminen y que el Organismo “pueda acceder a la planta y ejercer las funciones que le corresponden”.
El director del OIEA, Mariano Grossi, advirtió este sábado que el bombardeo de la central nuclear ucraniana “acentúa el riesgo totalmente real de un desastre nuclear que podría amenazar la salud pública y el medio ambiente de Ucrania y otros lugares”.
Citando a fuentes ucranianas, Grossi explicó que los reactores de la central no sufrieron daños y que tampoco se produjeron emisiones radioactivas, pero indicó que el recinto sufrió daños.
“Una acción militar que ponga en peligro la seguridad de la central nuclear de Zaporizhzya es completamente inaceptable y debe evitarse a toda costa. Cualquier acción militar dirigida hacia o desde la instalación equivaldría a jugar con fuego, con consecuencias potencialmente catastróficas”, advirtió.
