En las esquinas de la 3 y 5 Norte-Sur, el papel picado en diferentes tonalidades rinde homenaje a este ornamento tan representativo de México.
Andrea Casco
En el Centro Histórico de Puebla, los adornos de Día de Muertos ya lucen espectaculares, llenando de color y tradición la ciudad. La emblemática Flor de Cempasúchil y el papel picado decoran las calles, celebrando la temporada con su vibrante presencia.
Sobre la calle Reforma, se pueden apreciar ondas formadas por la flor de los veinte pétalos, simbolizando la vida y la muerte.
En las esquinas de la 3 y 5 Norte – Sur, el papel picado en diferentes tonalidades rinde homenaje a este ornamento tan representativo de México.
Además, tres catrinas monumentales han sido ubicadas sobre la Calle 16 de Septiembre, a la altura del Zócalo, atrayendo a turistas y locales para disfrutar de esta tradición que honra a los seres queridos que ya no están.
