El detenido confesó en interrogatorio que fue motivado a llevar a cabo el atentado por las declaraciones de Bolsonaro.
FUENTE: SPR Informa
A menos de una semana de que tome posesión Lula da Silva como presidente, crecen las tensiones en Brasil por los intentos de atentados por parte de seguidores de Jair Bolsonaro. Por ello, se están reforzando las medidas de seguridad hacia el próximo presidente brasileño, informó Flavio Dino, ministro de Justicia entrante.
“Todos los procedimientos serán reevaluados, con miras a fortalecer la seguridad. Y se intensificará la lucha contra los terroristas y los alborotadores. La democracia ha ganado y ganará”, dijo Flavio Mino.
El ministro entrante estuvo activo el fin de semana pasado, cuando la policía brasileña detuvo a George Washington de Oliveira Sousa el 24 de diciembre, simpatizante de Bolsonaro que planeaba llevar a cabo un atentado con un artefacto explosivo cerca del aeropuerto de la capital con el objetivo de “iniciar un caos” que propiciase un golpe de Estado de los militares contra Lula da Silva.
El detenido confesó en interrogatorio que fue motivado a llevar a cabo el atentado por las declaraciones de Bolsonaro: “Lo que me motivó a adquirir las armas (incautadas en su residencia) fueron las palabras del presidente Bolsonaro que siempre destaca la importancia del armamento civil”, declaró.
Además, confesó que el atentado fue planeado junto con otros bolsonaristas que están acampando frente al cuartel general del Ejército en la ciudad de Brasilia desde el triunfo electoral de Lula da Silva, con el fin de llamar a las Fuerzas Armadas a que lleven a cabo un golpe de Estado: “Decidí elaborar un plan con los manifestantes del Cuartel General del Ejército para provocar la intervención de las Fuerzas Armadas y la declaración del estado de sitio para impedir la instauración del comunismo en Brasil”, afirmó.
“No estamos hablando de un lobo solitario”, afirmó Flavio Dino; “Los graves acontecimientos del sábado en Brasilia comprueban que los tales campamentos ‘patriotas’ se convirtieron en incubadoras de terroristas […] No hay pacto político posible y no habrá amnistía para terroristas, sus apoyadores y financiadores […] Hay gente poderosa detrás de esto y la policía investigará. No permitiremos el terrorismo político en Brasil”, advirtió el ministro de Justicia entrante del gobierno de Lula da Silva.
