Aunque el incendio en West Hills ya está bajo control, las autoridades enfrentan grandes desafíos en Pacific Palisades y Eaton, donde las condiciones adversas han dificultado el trabajo de los equipos de emergencia.
Sicom Noticias
Los incendios forestales en el sur de California han cobrado fuerza nuevamente debido a los vientos de Santa Ana, que alcanzaron ráfagas de hasta 112 km/h el pasado 12 de enero, según el Servicio Meteorológico de Los Ángeles (NWS). La situación ha llevado al gobernador a emitir una Declaración de Desastre Mayor, tras reportarse 24 muertes, al menos 13 personas desaparecidas y más de 180,000 evacuados en todo el estado.
Condiciones críticas y alerta máxima
El Departamento de Bomberos de Los Ángeles (Cal Fire) alertó sobre la peligrosidad de los vientos combinados con baja humedad, que representan un riesgo extremo de propagación de incendios desde Ventura hasta San Diego. Anthony Marrone, jefe de Bomberos de Los Ángeles, advirtió que estas condiciones continuarán hasta el miércoles, lo que dificulta los esfuerzos para contener las llamas.
Actualización de incendios activos
- Pacific Palisades: El mayor incendio en la región ha consumido 9,594 hectáreas, con un avance de 424 hectáreas en las últimas horas. El control es del 11 %.
- Eaton (Pasadena y Altadena): Ha afectado 5,713 hectáreas, con un 27 % de contención.
- Hurst (Sylmar): Este incendio, que abarca 323 hectáreas, está controlado en un 89 %.
- Kenneth (West Hills): Completamente controlado tras quemar 425 hectáreas.
Aunque el incendio en West Hills ya está bajo control, las autoridades enfrentan grandes desafíos en Pacific Palisades y Eaton, donde las condiciones adversas han dificultado el trabajo de los equipos de emergencia.
Evacuaciones y recomendaciones
Cal Fire insta a la población a seguir las indicaciones de evacuación y mantenerse alerta ante posibles cambios en las condiciones del viento. “Es crucial que los residentes en áreas vulnerables actúen con rapidez. La seguridad es nuestra prioridad”, enfatizó Marrone.
La situación sigue siendo crítica, y las autoridades locales y estatales trabajan a contrarreloj para mitigar los efectos devastadores de estos incendios. Se espera que una mejora en las condiciones meteorológicas permita mayor progreso en el control de las llamas en los próximos días.
