Tras hacer la limpieza, algunos desayunaron los pocos alimentos que les quedaban, en medio de sus improvisadas casas de campaña hechas con trozos de tela y cartón a manera de camas.
Juan Pablo Ramírez
Durante la madrugada de este jueves 23 de mayo, parte del Viacrucis Migrante 2024, integrado por más de mil centroamericanos, se disolvió en la Avenida Ferrocarriles, al norte de la capital poblana, dejando a su paso basura acumulada, ropa y carriolas, entre otras pertenencias.
Cerca de las 07:00 HORAS, los pocos migrantes que quedaron en la zona se dedicaron a realizar el aseo del perímetro, quemando los despojos, para después continuar su camino rumbo a la Ciudad de México y luego a la frontera norte.
Tras hacer la limpieza, algunos desayunaron los pocos alimentos que les quedaban, en medio de sus improvisadas casas de campaña hechas con trozos de tela y cartón a manera de camas. Otros se asearon con agua embotellada.
“El recorrido es largo y poco a poco nos adaptamos a vivir en la calle”, comentaron.
El ánimo de los centroamericanos se hizo presente cuando escucharon el sonido del tren, aquella bestia de acero que se abría paso entre las vías. Algunos optaron por subirse a la locomotora, sin embargo, esta se dirige únicamente a la zona industrial de San Pablo Xochimehuacan y no conecta con vías nacionales que los acerquen a la Ciudad de México o al norte del país.
A pesar de las dificultades, los migrantes no pierden la esperanza y seguirán su rumbo hasta donde Dios les permita llegar.
