Reaperturan Gobiernos de México y de Ciudad de México nuevas salas del conjunto de dos bóvedas Museo de Historia Natural y Cultura Ambiental

Los contenidos de cada sala generan un vínculo con las personas que las visitan y buscan generar conciencia sobre el cuidado del medio ambiente y la naturaleza.

Sicom Noticias

La secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, y el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, reaperturaron tres nuevas salas: “Origen del Universo”, “Origen de la Tierra” y “Origen de la Vida”, que forman parte del conjunto de dos bóvedas del Museo de Historia Natural y Cultura Ambiental, como parte del Proyecto Prioritario “Chapultepec, Naturaleza y Cultura”.

La secretaria de Cultura federal, Alejandra Frausto Guerrero, resaltó que para la renovación de estas salas el Gobierno de México invirtió más de 270 millones de pesos (mdp), a través del Proyecto Prioritario Chapultepec, Naturaleza y Cultura, el cual articula el bosque cultural más grande del mundo y con el cual se ha creado nueva infraestructura, como la Línea 3 del Cablebús, las Calzadas Flotantes, Serpientes y Escaleras, el Mercado de Flores “Cambio de Dolores”, la Cineteca de Chapultepec, el Parque de Cultura Urbana (Parcur) y la Bodega Nacional de Arte, y se han revitalizado espacios como el Museo Nacional de Antropología, el Museo del Cárcamo de Dolores, el Panteón de Dolores, la Ermita Vasco de Quiroga y manantiales.

“Chapultepec es un proyecto de los Proyectos Prioritarios del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador; el recurso es federal, es de la Secretaría de Cultura, pero es una manera mucho más amplia de entender la cultura desde nuestro patrimonio biocultural. (…) El cariño se demuestra con recursos y sí son más de 270 millones de pesos del proyecto ‘Chapultepec: Naturaleza y Cultura’ invertidos aquí. Una inversión que no puede más que germinar como una posibilidad para los derechos de la niñez, para los derechos de la juventud, de conocer y reconocer el planeta en el que habitamos; y un espacio, que de la mano del sector privado vive y vivirá siempre con enorme dignidad. Entonces, sí es un día de agradecimiento, es un día de fiesta”, subrayó.

Por su parte, el jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, recordó que hace dos años se iniciaron trabajos de renovación en las bóvedas, en los que participan la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México, para impulsar el acceso a la ciencia, a la cultura y promover el cuidado de nuestro planeta.

“La renovación de todos estos espacios busca que todas y todos los habitantes de la ciudad y de México que vienen aquí, reflexionen sobre nuestros deberes para con el siempre frágil ecosistema de nuestro valle. Aquí, conocemos la historia natural y nos concientizamos para que esa historia siga y no se extinga nunca”, compartió.

Martí Batres destacó la trayectoria del hoy Museo de Historia Natural y Cultura Ambiental, que ha sido sede de colecciones de casi 3 mil piezas durante seis décadas y que ha permitido a generación tras generación conocer más sobre el origen y la evolución del planeta, el sistema solar y el universo.

El mandatario capitalino destacó que, tras 60 años, el Museo añada a su visión la Cultura Ambiental y, por tanto, el acento social; en este sentido, puso como ejemplo la convivencia de una jacaranda de más de 60 años de edad con la infraestructura del recinto.

“Nuestro museo agregó a su nombre la idea de Cultura Ambiental, es correcto que, en una de las metrópolis más pobladas de nuestro recinto dedicado a la historia natural, se preocupe de cómo es que todas y todos nosotros estamos construyendo o destruyendo la historia de la naturaleza. Los museos deben ser, así, creaciones sociales y comunitarias. (…) Un detalle es que, en esta renovación del Museo de Historia Natural y Cultura Ambiental, se hizo espacio para un espécimen botánico, una Jacaranda Mimosifolia, de 60 años que ha acompañado a este edificio toda su vida y que en el diseño final tiene ahora su propio espacio. Cuando se hace la crítica de los museos, se ha dicho que petrifican lo que exhiben, esa jacaranda nos recuerda la vida constantemente renovada y es muestra de que se puede hacer lo contrario, dar vida y no petrificar”, comentó.

En su intervención, la secretaria del Medio Ambiente de la Ciudad de México, Marina Robles García, reconoció la voluntad de todas las instancias involucradas, públicas y privadas, para hacer posible la intervención del Museo de Historia Natural y Cultura Ambiental.

Destacó que los contenidos de cada sala generan un vínculo con las personas que las visitan y buscan generar conciencia sobre el cuidado del medio ambiente y la naturaleza, objetivo por el que la Ciudad de México ha sido reconocida a nivel mundial.

“Tenemos en un primer conjunto de cuatro bóvedas, al dinosaurio, que nos muestra que también compartimos parte de la esencia de la vida; tenemos en la recepción un mamut; (…) tenemos un meteorito que nos recuerda que el universo está mucho más cerca de lo que creemos, que somos la misma cosa, que estamos totalmente entrelazados y que llegan a nuestro planeta partecitas de esta vastedad que es el universo. Y el esfuerzo por transformar a este museo, por supuesto que tiene que ver con una serie de cariños, de demandas, de búsqueda, de ofrecer a los niños, a las niñas de esta ciudad, un espacio para aprender sobre la vida, para aprender, además, a saber, que somos parte de esa vida y que tenemos que aprender a cuidarla y tenemos que aprender a relacionarnos cada vez mejor”, comentó.

Mientras que la presidenta del Fideicomiso Todos Juntos por el Museo de Historia Natural, Romina Stahl Hank, informó que han logrado reunir la suma de 70 mdp, que se suman a la inversión del Gobierno federal, a través de donaciones provenientes del Grupo Financiero Banorte, la Fundación Jenkins, la Fundación INTERprotección, Fundación Coppel, Marinela Servitje, Kodiak Aranzia, Gentera y Grupo Chinoin.

“El Fideicomiso ha podido movilizar y comprometer la suma de más de 70 millones de pesos de las diferentes organizaciones civiles y público en general, que junto con los 273 millones que ha destinado el Gobierno de la Ciudad de México, nos ha permitido invertir hasta ahora 343 millones de pesos en las nuevas instalaciones de este extraordinario museo de todos los mexicanos, y estamos comprometidos para continuar con la última etapa de remodelación”, finalizó.

Después de hacer el corte de listón inaugural, las autoridades recorrieron las tres nuevas salas interactivas con la guía de la especialista en física y astronomía Julieta Fierro Gossman y del maestro en Ciencias Luis Espinosa Arrubarrena, quienes explicaron el origen del Universo, la composición del Sistema Solar y el lugar que el planeta Tierra ocupa en ella, así como los elementos que conforman a las estrellas a las estrellas y lo meteoritos.

En la reapertura también estuvieron presentes la subsecretaria de Desarrollo Cultural del Gobierno de México, Marina Núñez Bespalova; la secretaria de Cultura de la Ciudad de México, Claudia Curiel de Icaza; la directora general de Coordinación de Políticas y Cultura Ambiental, Claudia Hernández Fernández; la directora del Fideicomiso Todos Juntos por el Museo de Historia Natural, Patricia Guerra, y la directora del Museo de Historia Natural y Cultura Ambiental, Laura Mercedes Jiménez del Arco.