El expresidente Evo Morales también denunció el golpe de Estado en desarrollo, al alertar sobre el despliegue de las Fuerzas Armadas y tanquetas en la Plaza Murillo, epicentro del poder político en La Paz.
Sicom Noticias
Miembros del Ejército de Bolivia, liderados por el general Juan José Zúñiga, irrumpieron en el Palacio Quemado, sede del Poder Ejecutivo, para intentar perpetrar un Golpe de Estado, al exigir la destitución del Gabinete Ministerial del presidente Luis Arce y ordenar el encarcelamiento de todos los militares, manteniendo a las Fuerzas Armadas en emergencia.
En respuesta, el presidente Luis Arce convocó a la población boliviana a movilizarse en defensa de la democracia y resistir el intento de toma del poder por la fuerza. Arce hizo un llamado urgente para que los ciudadanos salgan a las calles y rechacen el golpe militar.
La Central Obrera Boliviana (COB) reaccionó rápidamente declarando una huelga nacional indefinida. La COB instó a las organizaciones sociales y al pueblo boliviano a levantarse contra los golpistas y defender el orden democrático del país.
El expresidente Evo Morales también denunció el golpe de Estado en desarrollo, al alertar sobre el despliegue de las Fuerzas Armadas y tanquetas en la Plaza Murillo, epicentro del poder político en La Paz.
Paralelamente, se convocó a una reunión de emergencia de militares en la sede del Estado Mayor del Ejército en Miraflores, La Paz, a las 15:00 horas, para evaluar la situación y tomar decisiones estratégicas.
La comunidad internacional no tardó en reaccionar. La ministra de Relaciones Exteriores de Bolivia, Celinda Sosa Lunda, denunció las movilizaciones militares irregulares y pidió apoyo internacional para respaldar el gobierno de Luis Arce.
Varios líderes mundiales expresaron su condena y preocupación ante el golpe de Estado en Bolivia:
- Xiomara Castro, presidenta de Honduras, condenó el golpe y solicitó a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que exija respeto al poder civil y a la Constitución en Bolivia.
- Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, condenó enérgicamente el golpe y expresó su apoyo al presidente Luis Arce.
- Alberto Fernández, expresidente de Argentina, calificó las acciones como un levantamiento antidemocrático y respaldó al presidente Arce.
- Gabriel Boric, presidente de Chile, manifestó su preocupación y condenó la acción de fuerza del ejército boliviano.
- Miguel Díaz-Canel, presidente de Cuba, repudió el intento de golpe y expresó solidaridad con el presidente boliviano.
- Bernardo Arévalo, presidente de Guatemala, rechazó las acciones del grupo militar en Bolivia y expresó su apoyo al pueblo boliviano y a Luis Arce.
La situación en Bolivia sigue siendo tensa y en evolución, con el país en vilo ante la posibilidad de una escalada de violencia y una crisis institucional profunda.
