La oficina que dirige Michelle Bachelet teme por la seguridad del periodista y creen que su aparición en la televisión estatal no es tranquilizadora, porque se ven heridas en su rostro.
Redacción
La Oficina de Derechos Humanos ha pedido la liberación inmediata del periodista bielorruso Román Protasevich y la estudiante rusa Sofia Sapega, “detenidos ilegalmente” después de que el avión en el que viajaban a Lituania fuera desviado a Bielorrusia.
“La forma, mediante amenaza de usar fuerza militar, en que Protasevich fue secuestrado de la jurisdicción de otro Estado y llevado a la jurisdicción de Bielorrusia equivale a una entrega extraordinaria. Tal abuso del poder del Estado contra un periodista por ejercer funciones protegidas por el derecho internacional está recibiendo, y merece, la más enérgica condena”, dijo el portavoz Rupert Colville.
La oficina que dirige Michelle Bachelet teme por la seguridad del periodista y creen que su aparición en la televisión estatal no es tranquilizadora, porque se ven heridas en su rostro.
“Lo más probable es que esa aparición no fuera voluntaria y su ‘confesión’ de haber cometido graves crímenes haya sido forzada. La información obtenida bajo coacción no puede ser usada contra el señor Protasevich en ningún proceso legal. Esas confesiones están prohibidas por la Convención contra la Tortura”, recordó Colville.
Para la ONU este “sorprendente episodio” constituye una “escalada extremadamente preocupante” en la represión de voces disidentes en el país.
