Los adultos mayores recuerdan estos juegos con nostalgia, destacando cómo solían ser una fuente de diversión y aprendizaje.
Andrea Casco
Los clásicos juegos mentales como el “rompecocos”, “tira aros” y el “cubo de Rubik” siguen siendo populares, aportando grandes beneficios a la salud mental y la memoria, además de fomentar la persistencia y la paciencia.
Comerciantes locales han notado un incremento en la demanda de estos juegos por parte de padres y madres de familia en los últimos años. Este interés creciente también se refleja en algunas escuelas, donde se busca fomentar su uso como una opción divertida para alejar a las nuevas generaciones del uso excesivo de dispositivos electrónicos.
Los adultos mayores recuerdan estos juegos con nostalgia, destacando cómo solían ser una fuente de diversión y aprendizaje. En contraste, algunos jóvenes apenas conocen estos juegos, aunque empiezan a descubrir sus beneficios y el entretenimiento que proporcionan.
Estos juegos no solo brindan entretenimiento, sino que también son una herramienta valiosa para mejorar la concentración y el razonamiento lógico, haciendo que su presencia en la vida cotidiana siga siendo relevante y apreciada.
