Padres como Amal Awad han notado que el miedo ha afectado la capacidad de sus hijos para hablar correctamente.
Sicom Noticias
En un campamento improvisado en la Franja de Gaza, la logopeda Amina Al-Dahdouh trabaja con niños afectados por la guerra.
Debido al conflicto, muchos menores presentan dificultades para hablar, siendo la tartamudez el problema más común. Al-Dahdouh atiende a más de 50 niños con trastornos del habla, y hay muchos más en lista de espera.
La guerra ha causado un fuerte impacto en la salud mental de los niños.
Padres como Amal Awad han notado que el miedo ha afectado la capacidad de sus hijos para hablar correctamente. Su hija Fátima dejó de hablar durante los primeros días del conflicto, pero ha mostrado mejoría gracias a la terapia.
Las Naciones Unidas han advertido sobre los efectos a largo plazo de la guerra en la salud mental y física de los niños, con más de un millón de menores en Gaza que ahora necesitan apoyo psicosocial.
