Al activar los motores para el aterrizaje, se percibió un incendio en dicha parte del cohete, pero logró aterrizar en una sola pieza; no obstante, estalló al poco tiempo.
Redacción
Space X, la empresa estadounidense de fabricación aeroespacial y de servicios de transporte espacial, logró que su prototipo, la Starship SN10, aterrizara de manera vertical.
Este miércoles 3 de marzo, la compañía de Elon Musk realizó la tercera prueba de vuelo a gran altitud de dicho cohete, que tenía la misión de regresar a tierra de manera controlada.
Antes de iniciar, el lanzamiento fue abortado “en límite de empuje alto ligeramente conservador”. El mismo Elon Musk dijo que se aumentó el límite de empuje y recicló el propulsor para otro intento de vuelo más tarde.
La prueba, realizada en Boca Chica, Texas, consistió en despegue, vuelo en horizontal y su regreso a la plataforma de manera vertical.
Al activar los motores para el aterrizaje, se percibió un incendio en dicha parte del cohete, pero logró aterrizar en una sola pieza; no obstante, estalló al poco tiempo.
De esa forma, la Starship SN10 se convierte en el primer prototipo a escala real de dicha serie en hacer una vuelo de prueba exitosamente, contrario a sus antecesores, S8 y S9.
Con dicho cohete, la compañía Space X busca llegar a la luna, y posteriormente, a Marte.
