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Letras con Sentido – La verdad detrás de…

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La columna de Sergio Castro

La invasión de Israel contra la Franja de Gaza se agrava con el paso de los días, el día de ayer, Yemen declaró la guerra contra la nación judía en apoyo del pueblo del palestina, y si, más allá de ser una lucha por ideologías y fanatismo religioso, hay algo detrás que tiene que ver con la economía y la nueva geopolítica comercial.

Hace unas semanas, antes de que se desatara la guerra, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se presentó en la Asamblea de la ONU en Estados Unidos y mostró un mapa de la región israelí-palestina y declaró su plan para un nuevo Medio Este. Con un marcador rojo trazó una línea que conectaba diversas naciones, es decir, el corredor económico que se extiende desde la India hasta los Emiratos Árabes Unidos, pasando por Arabia Saudita, Jordania, Israel llegando a Europa.

Una estrategia económica importante, dada la poca influencia que comienza a tener Estados Unidos en el mundo y el poco valor del dólar, quieren contrarrestar a las BRICS y a la nueva ruta de la seda de China, es decir un rival de esta nueva manera de comercialización.

Recordemos que la antigua de la ruta de la seda es la ruta comercial más grande e importante de la humanidad, partiendo de China, Siria y el mar Mediterráneo y hoy los chinos quieren revivirla. Esta acción marcaría el futuro de la economía, el comercio y las políticas mundiales. A esto se suma el acuerdo ferroviario que firmaron Irán e Irak que coadyuvaría a la ruta marcada por el país asiático. 

Y es aquí donde debemos tener cuidado porque Estados Unidos es capaz de todo con tal de no perder su poder “local” en el mundo, no olvidemos las investigaciones de su propio país que indica que el atentado del 11 S fue planeado por ellos so pretexto de terminar con el terrorismo y su feroz guerra en medio oriente cuando la realidad era obtener el petróleo de aquellos países.

O bien, la supuesta “expansión de la OTAN” en 2014 cuando realmente se trataba de rodear, controlar y cortar el suministro de gas a Europa, ¿por qué? Porque Rusia es el principal proveedor de este combustible al viejo continente, de ahí su acercamiento con Ucrania. 

Y ni hablar de Irán, el segundo proveedor y con más reservas de gas en el mundo quien, de la nada, fue sancionado por Estados Unidos para que tampoco exportara a Europa, sumiendo al continente a una severa crisis.

Ya con estos dos países fuera del mapa,  de repente Israel propone como solución a la escasez de gas en Europa proveer del combustible con la ruta comercial que expusieron en Naciones Unidas, Conveniente. Sin embargo, el yacimiento de gas descubierto por Israel, se encuentra debajo de suelo palestino, y fue Hamás quien amenazó con atacar a Israel si robaban su gas. ¿a quién le pidió ayuda Israel para “terminar” con este conflicto?, sí a ese país.

Ya lo decía el mismo Netanyahu cuando estalló el conflicto, los palestinos deben dejar la Franja e irse al desierto, claro, evacuada Gaza, tienen todo el derecho de explotar su territorio, adueñarse del gas y terminar con su más grande competencia. Una estrategia genocida. 

Ya no bastan las sanciones económicas o los foros en los organismos internacionales, ahora hay que optar por estrategias más fuertes, que den mejores resultados, no importa si mueren inocentes, revivamos los conflictos en el pasado para obtener lo que queremos en el futuro a costa de lo que sea. Bien reza el dicho en la guerra y en el amor todo se vale, y parece que es cierto.