La presidenta del organismo asistencial, Gaby Bonilla, destacó el cuidado de detalles en la remodelación, resaltando la importancia de transmitir mensajes positivos a los menores.
Adan Morales
Las Casas de Asistencia del Sistema Estatal DIF han experimentado una transformación significativa para consolidarse como verdaderos hogares que brindan atención a menores en situaciones particulares que requieren permanecer en estos espacios por meses o incluso años.
El Comité Administrador Poblano para la Construcción de Espacios Educativos (Capcee) destinó una inversión superior a los 7 millones de pesos para la rehabilitación de diversas áreas que, antes de la gestión de Gaby Bonilla, se encontraban en condiciones precarias.
La presidenta del organismo asistencial, Gaby Bonilla, destacó el cuidado de detalles en la remodelación, resaltando la importancia de transmitir mensajes positivos a los menores. Los salones de clases fueron transformados para proporcionar a los niños y adolescentes espacios dignos que garantizan una educación de alta calidad, complementados con áreas verdes y recreativas.
Cada espacio remodelado fue diseñado pensando en el bienestar de cada menor, considerando su etapa de vida, así como en el personal encargado de atender a diario a niñas, niños y adolescentes. Además de las aulas, se renovó un salón de usos múltiples para que los infantes disfruten de diversas actividades. También se mejoraron áreas administrativas y consultorios, así como los jardines. En el exterior, las fachadas fueron pintadas y se instalaron imágenes lúdicas.
Mario Alberto Cruz González, director General del Capcee, resaltó la calidad de todas las instalaciones y la dedicación para crear espacios dignos que van más allá de la rehabilitación de las casas, buscando realmente generar un hogar, tal como lo visualiza la presidenta Gaby Bonilla.
Al compartir los resultados de esta intervención, Gaby Bonilla subrayó que más allá de la inversión económica, la dignificación de cada espacio vale la pena por tratarse de un infante que merece toda la atención de las autoridades.
“Cuando un pequeñito llega a nuestro cuidado, todos son iguales, porque es así, aquí todos merecen la misma atención, el mismo cuidado, desentendiendo claro las circunstancias. Están las psicólogas, terapia de lenguaje, con la misma atención, con la misma dignidad, con los mismos límites, porque sabemos que sus capacidades lo permiten”, afirmó Gaby Bonilla.
