Estos jóvenes son conscientes de que muchos de los ídolos mediáticos son productos construidos cuidadosamente para satisfacer los intereses comerciales de la industria del entretenimiento.
Andrea Casco
En la actualidad, sin importar el lugar del mundo en el que nos encontremos, las nuevas generaciones tienen una amplia variedad de ídolos a quienes admiran. Los jóvenes se han convertido en consumidores ávidos de contenido, disfrutando de una multitud de opciones que, en muchos casos, son efímeras.
No obstante, la globalización y la influencia mediática pueden desempeñar un papel relevante en la reproducción de ciertos valores y patrones de comportamiento entre los jóvenes. Es importante analizar cómo los nuevos ídolos mediáticos afectan la identificación y la proyección de los jóvenes, así como la adopción pasajera de modas específicas, al percibirlos como fenómenos de masas construidos al servicio de los intereses de las empresas audiovisuales.
En la sociedad actual, la mayoría de los jóvenes comprenden el papel de la mercadotecnia y, en muchas ocasiones, dudan de la autenticidad de los llamados “ídolos”. Estos jóvenes son conscientes de que muchos de los ídolos mediáticos son productos construidos cuidadosamente para satisfacer los intereses comerciales de la industria del entretenimiento.
Es importante fomentar un espíritu crítico entre los jóvenes, para que puedan discernir entre lo auténtico y lo fabricado. Esto les permitirá tomar decisiones informadas y desarrollar sus propias identidades, en lugar de ser influenciados por modas pasajeras o valores superficiales promovidos por los medios de comunicación.
La sociedad en su conjunto debe promover la diversidad de modelos a seguir y brindar oportunidades para que los jóvenes encuentren inspiración en figuras que genuinamente reflejen sus valores y aspiraciones. De esta manera, se fomentará un desarrollo saludable y una formación de identidad sólida entre las nuevas generaciones.
