En México, los nacimientos se instauraron a principios de la Conquista como parte del proceso de evangelización, convirtiéndose en un símbolo de las fiestas navideñas.
Adan Morales
A pesar de las nuevas tendencias y el avance tecnológico, muchas familias poblanas preservan la tradición de colocar nacimientos durante la época decembrina. Entre ellas, la familia Águila Trujillo destaca por no dejar pasar un solo año sin adornar su hogar con más de 250 piezas que forman parte de su nacimiento, tradición que han mantenido durante 32 años.
El montaje es un esfuerzo colectivo y un momento de convivencia familiar, donde todos participan con dedicación y responsabilidad para recibir al Niño Jesús.
“María, José, el ángel y los tres Reyes Magos son figuras que tienen más de 20 años con nosotros; son un verdadero tesoro que protegemos con mucho cuidado”, comentó Aurora Trujillo, integrante de la familia.
Este año, comenzaron a instalar su nacimiento el 12 de diciembre y lo mantendrán hasta el 7 de enero, con la esperanza de añadir más piezas en 2025 y seguir fomentando la paz y la armonía. Su nacimiento incluye luces LED, esferas, lama, paja, plaxtle y una casa de leña, logrando un diseño tradicional que celebra la llegada del Salvador hace más de dos mil años.
Aurora expresó su preocupación por cómo las decoraciones modernas han desplazado a los nacimientos en muchos hogares.
“Hay mucha gente que ya se olvidó de nuestras verdaderas tradiciones mexicanas. El Santa Claus, que es extranjero, está ganando terreno, pero en nuestro país debe ser el Niño Jesús con su nacimiento”, afirmó.
Origen de los nacimientos
La tradición de los nacimientos se atribuye a San Francisco de Asís, quien en sus primeros años los concebía como representaciones vivientes de la “adoración de los pastores”. Con el tiempo, estas escenificaciones fueron reemplazadas por figuras y adornos. En México, los nacimientos se instauraron a principios de la Conquista como parte del proceso de evangelización, convirtiéndose en un símbolo de las fiestas navideñas.
Los nacimientos mexicanos, además de ser variados en formas y tamaños, conservan personajes emblemáticos como el Niño Jesús, la Virgen María, José, los Reyes Magos, pastores, el pesebre y la estrella de Belén, representando una tradición que trasciende generaciones y une a las familias en esta temporada especial.
