El hecho que dicha fecha coincida con las vacaciones de verano para muchas personas lo convierte en un momento idóneo para dedicarnos tiempo a nosotros mismos, aunque sea por un día.
Andrea Casco
Caminar, leer, tejer, tomar un café; esas son algunas de las actividades cotidianas que las personas realizan para encontrar relajación en medio de sus ajetreadas vidas.
La sociedad avanza a un ritmo vertiginoso, marcado por el implacable paso del tiempo y la presión tanto personal como social. No obstante, la mayoría de nosotros sabemos que en ocasiones es fundamental detenernos; somos conscientes de que necesitamos encontrar momentos para relajarnos y recargar energías.
Cada 15 de agosto se celebra el Día Mundial de la Relajación, que ha ganado notoriedad durante los últimos años, esta celebración.
El hecho que dicha fecha coincida con las vacaciones de verano para muchas personas lo convierte en un momento idóneo para dedicarnos tiempo a nosotros mismos, aunque sea por un día.
Si bien viajar es considerado como una de las principales formas de relajación, no todos pueden costearlo debido a su alto costo.
Sin embargo, existe la opinión contraria: algunos afirman que una simple sonrisa puede ser parte integral de nuestra rutina diaria y contribuir significativamente a nuestra sensación de tranquilidad.
