El repunte navideño es positivo, pero los restauranteros deben mejorar estrategias para aumentar ingresos futuros.
Andrea Casco
Durante la noche del 31 de diciembre, el sector restaurantero en la capital poblana reportó un aumento del 15% en sus ventas, reflejando una notable afluencia de comensales en la última noche del año. Sin embargo, las cifras no lograron superar las ganancias alcanzadas durante el cierre de 2023.
Los restaurantes ofrecieron menús especiales y paquetes para la cena de fin de año, con precios que oscilaron entre los 700 y 1,500 pesos por persona. Este esfuerzo buscó atraer a familias y grupos que optaron por despedir el año en un ambiente festivo fuera de casa.
Aunque el repunte confirma que las festividades de diciembre siguen siendo una de las temporadas más favorables para el sector, empresarios restauranteros consideran necesario redoblar esfuerzos para mejorar las estrategias de atracción y aumentar los ingresos en años futuros.
El inicio de 2025 deja un balance positivo, pero también un desafío para seguir fortaleciendo este importante motor de la economía local.
