El mundial de Tae Kwon Do en Puebla

La inauguración se realizó el 14 de julio en el lugar designado para la sede, el Centro Expositor y de Convenciones de Puebla ubicado en la zona de los fuertes.

Cuauhtémoc Hernández

En el año 2013 Puebla hizo historia al ser sede del Campeonato Mundial de Taekwondo, que en su edición número 21 tocó por primera ocasión suelo mexicano; el certamen se realizó del domingo 14 al domingo 21 de julio.

La inauguración se realizó el 14 de julio en el lugar designado para la sede, el Centro Expositor y de Convenciones de Puebla ubicado en la zona de los fuertes, con un grupo de danzantes que representó la leyenda del volcán Popocatépetl para dar paso al desfile de las más de 120 delegaciones que competirían a lo largo de la semana.

Cada una de las representaciones era acompañada por una china poblana símbolo de la cultura local, la abanderada de la selección mexicana fue la campeona olímpica en Beijing 2008 y medallista de bronce en Londres 2012, María del Rosario Espinoza. La taekwondoin, era entonces la máxima esperanza para cosechar una presea en casa.

Lo que siguió a ello fue una de las experiencias más gratas que he vivido como reportero de la fuente deportiva, tuve la oportunidad de estar tras bambalinas (esto gracias a que la empresa para la que aún laboro contaba con derechos de transmisión del evento) del primer evento internacional de talla mundial que reunió a poco más de 850 taekwondoines, lo mejor de cada país participante, fueron siete días de jornada larga donde era importante estar desde el inicio de la fase eliminatoria, y para ello siempre hubo una gran entrega del equipo técnico y de conducción de lo que hoy es el Sistema Estatal de Telecomunicaciones de Puebla (SET Puebla), sobre todo para dar cobertura a los representantes que conformaban la selección nacional de México.

El resumen de la competencia no fue el idóneo para el equipo tricolor que se ubicó en el tercer puesto del medallero con 5 preseas cosechadas en los 7 días de competencia, por debajo de Cuba y Corea del Sur quienes refrendaron la hegemonía en la disciplina oriunda de su nación, por la selección mexicana el poblano Damián Villa en los -58 kg logró la única presea de bronce, mientras que Briseida Acosta en la rama femenil en los +73 kg (durante el último día de competencia), René Lizárraga en los -80 kg y Abel Mendoza en los -63 kg aportaron las medallas de plata.

En cuartos de final supo resolver con sangre fría ante su igual de Gran Bretaña, Ruebyn Richards, a quien sacó 4 puntos sin permitir ningún golpe que le diera suma al inglés, ya con el bronce asegurado encaró al contendiente surcoreano, Yoo Jin Kim, que buscaba colarse para sumar la tercer presea áurea, pero Uriel se vio estoico ante este al asegurar ahora la presea de plata en medio de aplausos. El duelo final se dio ante Albert Gaun de Rusia con una buena asistencia en las gradas por parte del público local, el duelo inició con la suma de puntos para el ruso, que en el tercer asalto ya sumaba dos en el tablero, a pesar de estar en desventaja por un punto Uriel Adriano colocó una patada con giro al pecho que lo puso 3-2 a casi 20 segundos de concluir el duelo.

La euforia fue total para quienes se dieron cita esa noche en el recinto, se dejó escuchar el Cielito Lindo que me enchinó la piel, mientras se revisaba el video ante la protesta rusa, faltando los 10 segundos el público gritaba la cuenta regresiva mientras el mexicano se mantenía a la defensiva ante el incesante ataque del oponente que buscaba hacerse con la gloria, a dos segundos otro contacto por parte del ruso, hizo contener el aliento en la revisión del video, tras deliberar se hizo oficial la victoria para el joven nacido en Ciudad Victoria, Tamaulipas, mismo que se hincó y lloró de júbilo en medio de aplausos y gritos de felicidad por la hazaña conseguida.

Puebla fue testigo de cómo le fue colgada la presea áurea mientras resonaba el himno nacional, al término de la ceremonia con mucha humildad, el campeón mundial agradeció con una reverencia al público por el apoyo demostrado. Lo triste de ese certamen de 2013, fue sin duda la actuación de María de Rosario Espinosa quien no pudo pisar el pódium y fue eliminada muy temprano en la competencia, a pesar de ello, su participación en Puebla fue una grata experiencia que dejó un aprendizaje en mi labor y que me marcó para siempre.

FUENTE: https://puebladeportes.blogspot.com/