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Comparte CNPC reporte de actividad del volcán Popocatépetl

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La CNPC, Cenapred, UNAM y la Universidad de Colima brindan información precisa. Se exhorta a la población a informarse por fuentes oficiales, evitar rumores y respetar el radio de seguridad de 12 kilómetros.

Sicom Noticias

La Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) informa que el volcán Popocatépetl se mantiene en el nivel de alerta amarilla fase 2; hasta el momento, la actividad del coloso no representa un riesgo mayor para la población.

De acuerdo con el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), y con base en los análisis de los parámetros de monitoreo visual, sísmico, de deformación y emisión de gases, se concluye que, a corto plazo, los escenarios más probables son:

• Episodios de tremor con amplitud variable.
• Emisiones de ceniza.
• Baja probabilidad de explosiones menores a moderadas, que podrían generar la expulsión de fragmentos incandescentes dentro del radio de exclusión de 12 kilómetros.

La CNPC, el Cenapred, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Universidad de Colima, trabajan en conjunto para brindar información precisa y confiable. Exhortamos a la población a informarse por medio de fuentes oficiales, no hacer caso de rumores y respetar el radio de seguridad de 12 kilómetros.

Asimismo, se invita a la población atender las siguientes recomendaciones ante la posible caída de ceniza:

• Limpiar ojos y garganta con agua pura.
• Utilizar lentes de armazón y evitar los de contacto para reducir la irritación ocular.
• Cerrar ventanas o cubrirlas y permanecer lo más posible en interiores.
• Evitar la acumulación de ceniza en techos y patios.
• Cubrir recipientes de agua para evitar su contaminación.

Hasta la emisión de este reporte no se registra caída de ceniza en las comunidades aledañas al volcán.

El Gobierno de México mantiene su compromiso de coordinar esfuerzos con el sector científico e incorporar los mayores desarrollos tecnológicos a la reducción de riesgos volcánicos, privilegiando la protección de la vida y el patrimonio de la población.