La avispa melífera mexicana vive en colonia perpetua, produciendo y almacenando miel para alimentar a toda la colonia durante el invierno, apoyando siempre a todo el colectivo.
Sicom Noticias
En un descubrimiento que desafía las percepciones convencionales sobre las avispas, investigadores han encontrado una especie única en México, la Polistes instabilis, más comúnmente conocida como la avispa melífera mexicana, que muestra un comportamiento social y productivo inusualmente altruista.
A diferencia de sus contrapartes, esta especie vive en colonias perpetuas, donde cada miembro trabaja incansablemente para producir y almacenar miel, destinada a alimentar a toda la colonia durante el invierno. Este comportamiento cooperativo y solidario refleja una estructura social sorprendente, donde no se observa la misma tendencia a la ruptura social que se ve en otras especies de avispas.
Los estudios muestran que la Polistes instabilis es una de las pocas especies de avispas que realiza la producción de miel a gran escala, similar a las abejas, a pesar de no tener una relación directa con las abejas, estas avispas regurgitan néctar en su nido para producir la miel, lo que constituye un fenómeno único en el mundo de los insectos.
Entomólogos que han investigado esta especie han tomado muestras de nidos naturales, confirmando fuentes florales comunes como el girasol, el mezquite y la melaza como las principales fuentes de néctar utilizadas por estas avispas.
Este descubrimiento no solo despierta un interés científico significativo, sino que también tiene implicaciones prácticas, ya que la miel producida por estas avispas se considera generalmente segura para el consumo humano. De hecho, ha sido recolectada y vendida por recolectores durante más de un siglo en América Central y del Sur.
En resumen, la Polistes instabilis emerge como una especie fascinante que desafía las expectativas y ofrece nuevas perspectivas sobre la vida social y productiva de las avispas en el mundo natural.
