El funcionario señaló que una de las principales problemáticas es la falta de cultura en la separación de residuos
Brisselda Sarabia
El director de Servicios Públicos del municipio, Carlos Espinoza, informó que en los últimos años se ha registrado un incremento considerable en la cantidad de basura recolectada en la localidad, situación que representa un desafío creciente para el manejo de residuos sólidos.
Espinoza detalló que, en días laborales normales, se recolectan entre 15 y 16 toneladas diarias; sin embargo, durante fechas festivas esta cifra puede alcanzar hasta las 60 toneladas por día, lo que ha sobrecargado el sistema de recolección y generado afectaciones tanto al equipo como al personal operativo.
El funcionario señaló que una de las principales problemáticas es la falta de cultura en la separación de residuos. En particular, advirtió sobre el riesgo que representa el desecho inadecuado de vidrios, los cuales, al ser arrojados sin previo aviso dentro del camión compactador, pueden dañar el sistema hidráulico y poner en peligro a los trabajadores.
“Hemos tenido casos en los que recolectores se han cortado con vidrios mal dispuestos”, afirmó.
Además, mencionó que los camiones recolectores reciben con frecuencia residuos como carnes en descomposición y otros materiales que dificultan aún más el proceso de recolección. Reconoció que actualmente es complicado implementar una separación efectiva debido a la falta de vehículos suficientes y al tiempo que implica trasladar los desechos hasta el tiradero municipal, ubicado a una distancia considerable.
Finalmente, Espinoza hizo un llamado a la ciudadanía a colaborar con prácticas más responsables, como la separación adecuada de residuos y el aviso previo al personal de recolección cuando se dispongan materiales peligrosos.
