Como parte de la velada, Argelia Fragoso, quien es también maestra de canto, presentó a una de sus jóvenes alumnas, Maya Burns, quien interpretó el clásico bolero La gloria eres tú, de José Antonio Méndez.
Sicom Noticias
Temas del repertorio romántico del bolero como Cien años, Tres palabras, Tú me acostumbraste, Te extraño, Todo y nada, Delirio y Mucho corazón, formaron parte del repertorio ofrecido por la cantante y pianista Argelia Fragoso, como parte del concierto denominado Mi voz al mundo, ofrecido en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, en el marco del programa Música INBAL en la Ponce, organizado por la Coordinación Nacional de Música y Ópera.
Obras de Agustín Lara, Consuelo Velázquez, Armando Manzanero, Felipe Garrido, Ema Elena Valdelamar, María Grever y César Portillo de la Luz, entre otros compositores, fueron interpretadas por la maestra Argelia Fragoso, para beneplácito del público.
Canciones como Quizás, quizás, quizás, La flor de la canela, Quién será, fueron coreadas por los asistentes en la Sala Manuel M. Ponce para disfrutar el arte de Argelia Fragoso, reconocida internacionalmente por su particular tesitura vocal, la cual ha cultivado durante más de 40 años, en los que ha incursionado en una diversidad de géneros, como la balada, el bolero y el jazz, grabando 21 discos.
Como parte de la velada, Argelia Fragoso, quien es también maestra de canto, presentó a una de sus jóvenes alumnas, Maya Burns, quien interpretó el clásico bolero La gloria eres tú, de José Antonio Méndez y, a petición del público que recibió con agrado su canto, también ofreció Un mundo raro, de José Alfredo Jiménez.
Fragoso representa la perfecta unión entre el talento nato y los estudios especializados. En el Conservatorio Franz Liszt de Weimar, en Alemania, obtuvo con honores la licenciatura de piano, canto y dirección coral y orquestal, señala en su página oficial la Havana Music School.
Argelia Justina Fragoso Molina nació en La Habana el 14 de mayo de 1957. Heredó el amor por la música de sus padres, quienes le cantaban canciones tradicionales cubanas y le permitieron codearse con intérpretes notables como César Portillo de la Luz y Ángel Díaz.
Posee un gran registro de contralto, cálido y profundo, además de una impactante musicalidad, perfecta afinación y exquisita dicción, que hacen de su canto un regalo para los oídos más exigentes. Su voz versátil la ha llevado a recorrer disímiles géneros como el son, el pop, el filin, el bolero y la balada, con los que ha deleitado al público en los escenarios más grandes del mundo.
Entre sus canciones más conocidas se encuentran Murió la flor, Mi ayer, En busca de una nueva flor, Olvidarte y He perdido contigo. Por su talento y trayectoria, se le conoce como “La voz de oro de Cuba” y “La dama de la canción”.
