Alegría y fiesta en los barrios tradicionales de Puebla por ensayos previo a los días de carnaval

La tradición dicta que dos domingos antes de la fiesta de la carne, la alegría ya debe inundar cada barrio a través de ensayos de las piezas que habrán de ejecutarse los días de carnaval.

ADAN MORALES

Es la fiesta que se vive previo al carnaval en los barrios de El Alto, Analco, La Luz, Xonaca, Xanenetla y Los Remedios, los sitios más antiguos y tradicionales de la capital poblana.

“Es de generación en generación; por ejemplo, yo empecé desde los 8 años de edad, ahorita tengo 58 años y sigo bailando. Sobre todo, con el amor al barrio para que todo se vea bien”, comenta Carlos Sánchez, habitante del Barrio de Xonaca.

Y ese amor al barrio es el que fomenta la organización y la unidad, pero sobre todo la ganas de demostrar cuál es la mejor cuadrilla.

“La mayoría son jóvenes que se están integrando a esta parte de la cultura que tiene Puebla y son fácil unos 80 integrantes en la cuadrilla, aproximadamente”, comentó Soledad Conde, integrante de la cuadrilla ‘La Xonaquera’

La tradición dicta que dos domingos antes de la fiesta de la carne, la alegría ya debe estar presente en cada barrio a través de ensayos de las piezas que habrán de ejecutarse los días de carnaval.

“Ensayamos los bailables en especial lo que es la ‘primavera’, ‘la entrada’, ‘la estrella’, ‘el charrito’, ‘los listones’, ‘la garrocha’; eso son los bailes típicos que hacemos aquí”, mencionó Vannesa Ruiz, habitante del Barrio de Xonaca

La música es la que mueve corazones y hace que la sangre fluya con emoción por todo el cuerpo de un verdadero carnavalero.

Alejandro Serrano es uno de ellos, cada año se prepara para tener el mejor traje de huehue, personaje emblemático del carnaval que significa “viejo” o “anciano.

“Yo me disfrazo o me visto como de huehue, mi careta, yo le meto 22 plumas a mi sombrero, mi capa tradicional de guerreros aztecas ese es mi vestuario”, comentó.

Hasta 17 mil pesos invierte en su traje -ya casi lo tiene listo- y claro que vale la pena vivir con austeridad todo el año porque el carnaval, es fiesta, es tradición y bien lo merece.

“Uno mismo lo financia, como tú te quieras lucir es lo que te va a costar, quieres meter capa nueva, vas a necesitar pintor, vas a buscar tus lentejuelas, quieres unas plumas, buscar la más grandes las que más se lucen, de acuerdo al color de capa y forro es como tú vas a lucirte”, finalizó.

Es el barrio de Xonaca un sitio donde sus habitantes enfrentan los desafíos de una ciudad en constante crecimiento, pero están aferrados a no perder sus tradiciones, aquellas donde las nuevas generaciones ya incursionan.