El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud afirmó que el país está en un alentador proceso de reducción de la epidemia al completar 17 semanas consecutivas a la baja de todos los indicadores.
Redacción
La eficacia de las vacunas COVID-19 para reducir infecciones, admisiones hospitalarias y defunciones empieza a ser evidente, y conforme avanza la inmunización se reduce la actividad epidémica, afirmó el secretario de Salud
Destacó que del domingo 17 al lunes 18 de mayo ocurrió el menor número de fallecimientos en un año con 56 casos.
Ante el descenso de la pandemia por COVID-19, señaló, las restricciones de movilidad en el espacio público se van modificando de manera ordenada, paulatina y con precaución, poniendo en práctica todo lo aprendido sobre las medidas sanitarias y de mitigación: sana distancia, uso correcto de cubrebocas y lavado frecuente de manos con agua y jabón.
Al respecto, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud afirmó que el país está en un alentador proceso de reducción de la epidemia al completar 17 semanas consecutivas a la baja de todos los indicadores: casos nuevos, ocupación hospitalaria, defunciones y porcentaje de positividad.
Entre las semanas epidemiológicas 17 y 18, la reducción de casos estimados es de 19 por ciento, y este porcentaje es mayor en comparación con lo registrado la misma semana del año pasado. Los casos activos estimados representan menos de uno por ciento del total desde el inicio de la pandemia; es decir, personas que se contagiaron en los últimos 14 días y pudiesen contagiar a otras.
Advirtió que “no hay que cantar victoria” y seguir atendiendo las medidas de prevención, incluyendo la vacunación, que en este momento es la más relevante, por lo que hizo un llamado a las personas para que acudan a vacunarse. Entre más cuenten con la vacuna, más rápido se acabará la epidemia, comentó.
El acceso a la vacunación es más rápido para las personas que se encuentran en cada uno de los sectores poblacionales que recibe el biológico, debido al incremento del abastecimiento por parte de las farmacéuticas.
Este 17 de mayo fueron aplicadas 338 mil 442 dosis, para un acumulado de 23 millones 646 mil 106 desde el 24 de diciembre del 2020. En la primera semana de vacunación de mujeres embarazadas a partir de la novena semana de gestación, 7 mil 133 recibieron la primera dosis.
Durante esta semana se prevé que lleguen a México más de cinco millones de vacunas, y será la cifra más alta en un lapso similar. En los meses de junio y julio habrá mayor abastecimiento de vacunas, lo que permitirá ampliar la capacidad de inmunización en el menor tiempo posible, precisó.
López-Gatell Ramírez destacó que la Política Nacional de Vacunación contra COVID-19 está basada en la evidencia científica para el mejor uso de la vacuna con el propósito de reducir la mortalidad y la carga de enfermedad. Derivado de ello, la inmunización inició en personas de 60 años y más, al ser el sector más susceptible a presentar las formas graves de la enfermedad y de fallecer. Posteriormente las personas de 50 a 59 años.
Esta estrategia brinda la posibilidad de que al inmunizar a 20 por ciento de la población, se puede reducir hasta 80 por ciento la mortalidad, meta que se espera alcanzar en los próximos meses.
Respecto al uso de cubrebocas, indicó que es un instrumento de prevención, auxiliar y útil para evitar la expulsión de saliva que lleva el virus de las personas infectadas, por lo cual se debe seguir utilizando de forma correcta, sobre todo en lugares públicos cerrados.
Las personas que padecieron COVID-19 y cuentan con inmunidad o han completado su esquema de vacunación, tienen menor capacidad de contagio; sin embargo, no está demostrado que se reduzca la probabilidad de transmitir los virus, porque pueden permanecer en la garganta sin que causen síntomas como fiebre, tos, dolor de garganta o de cabeza, dijo.
