Este incidente no es aislado, ya que los médicos señalan que la intendenta ha mostrado un comportamiento agresivo en varias ocasiones, lo que ha llevado a que el personal se niegue a trabajar hasta que se encuentre una solución.
Enid Herrera
Este viernes, el Centro de Salud con Servicios Ampliados (CESSA) de Izúcar de Matamoros enfrentó un paro de labores por parte de su personal, lo que generó una larga fila de ciudadanos a la espera de atención médica.
Los enfermeros, administrativos y pacientes expresaron su malestar ante la situación, que se originó por un conflicto con una trabajadora del área de intendencia.
Según los testimonios, la empleada, que padece problemas de demencia senil, agredió física y verbalmente a una doctora durante la mañana. Este incidente no es aislado, ya que los médicos señalan que la intendenta ha mostrado un comportamiento agresivo en varias ocasiones, lo que ha llevado a que el personal se niegue a trabajar hasta que se encuentre una solución.
El personal del CESSA espera que los directivos y el sindicato tomen medidas para abordar el conflicto, dado que la trabajadora lleva dos años sin cumplir adecuadamente con sus labores, pasando la mayor parte del tiempo en el área de sala de espera. La situación ha suscitado preocupación por la seguridad y el bienestar del personal y los pacientes en este centro de salud.
