Los militares asignados a la Guardia Nacional conservarán sus derechos laborales, mientras que los exelementos de la extinta Policía Federal serán reasignados a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Sicom Noticias
Con 68 votos a favor y 42 en contra, el Senado aprobó la reforma constitucional que integra definitivamente a la Guardia Nacional bajo el control de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). La reforma ahora debe ser ratificada por más de la mitad de los Congresos locales antes de ser promulgada.
La modificación, propuesta por el presidente López Obrador, define a la Guardia Nacional como una fuerza de seguridad pública de carácter permanente, con personal de origen militar y formación policial.
Además, los militares asignados a la Guardia Nacional conservarán sus derechos laborales, mientras que los exelementos de la extinta Policía Federal serán reasignados a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Una vez que entre en vigor, el Congreso tendrá 180 días para ajustar el marco legal de la Guardia Nacional, que seguirá operando bajo las normas actuales hasta entonces. Los jefes de la Guardia Nacional serán designados por el presidente y ratificados por el Senado o la Comisión Permanente del Congreso.
