Entre otras cosas, introduce la elección por voto popular de 1,800 ministros, magistrados y jueces, con una elección extraordinaria en 2025 para renovar a todos estos funcionarios.
Adan Morales
La Reforma Judicial busca implementar varias modificaciones significativas en el funcionamiento de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y el sistema judicial en general. Entre las principales propuestas se encuentra la reducción del número de ministros de la SCJN de 11 a 9, lo cual se espera optimice el trabajo del máximo tribunal del país.
Además, se propone reducir el periodo de encargo de los ministros de 15 a 12 años, lo que permitiría una mayor rotación y renovación en la composición de la Corte. También se plantea la eliminación de las Salas, de modo que la Corte solo sesionará en Pleno, garantizando que todas sus sesiones sean públicas para fomentar la transparencia.
Otro cambio relevante es la eliminación de la pensión vitalicia (haber de retiro) para los actuales y futuros ministros y ministras, lo cual se alinea con la propuesta de ajustar sus remuneraciones al tope máximo establecido para el Presidente de la República, sin excepciones, en un esfuerzo por racionalizar los gastos públicos.
La reforma también introduce la elección por voto popular de 1,800 ministros, magistrados y jueces, con una elección extraordinaria en 2025 para renovar a todos estos funcionarios. Esto se enmarca en una iniciativa para democratizar la selección de los encargados de impartir justicia en el país.
Asimismo, se propone la eliminación del Consejo de la Judicatura, creando en su lugar el Tribunal de Disciplina Judicial, que se encargaría de supervisar y sancionar las conductas inapropiadas dentro del sistema judicial. En cuanto a las regulaciones para jueces, se establece la prohibición de suspender leyes federales y se imponen plazos máximos para resolver asuntos fiscales (seis meses) y penales (un año), con el fin de agilizar los procesos judiciales y mejorar la eficiencia del sistema.
