La Ministra Ana Margarita Ríos Farjat recibió una presea en honor a su padre, quien fue ejemplo a seguir por su entrega y compromiso con la Carrera Judicial.
sicom Noticias
En compañía de familiares y personas destacadas del ámbito académico y jurisdiccional, la Ministra Ana Margarita Ríos Farjat expresó la inspiración que su padre, el Magistrado en Retiro Rodolfo Ricardo Ríos Vázquez, despertó en ella y en juzgadoras y juzgadores para dedicar su vida al bienestar y la armonía social desde el ámbito jurisdiccional.
Lo anterior en Monterrey, Nuevo León, su ciudad natal, donde magistrados y jueces de circuito realizaron un homenaje póstumo a la trayectoria profesional del Magistrado en Retiro Rodolfo Ricardo Ríos Vázquez, con más de 43 años de servicio en el Poder Judicial de la Federación.
La Ministra Ríos Farjat celebró la oportunidad de hablar de cosas buenas, de personas buenas, de principios morales y éticos, “este homenaje va más allá de eso, celebro que nos reunamos por una causa elevada, inspiradora, constructiva y más en un entorno de intranquilidad, de desconfianza, de violencia, de frivolidad, de egoísmo y tengamos mucho cuidado con esto, porque por más fuerte que pueda sonar, cuando una sociedad se conduce así, en estos negativos, esto es un rasgo distintivo de carencia de cultura” expresó.
La togada recordó que su padre fue un juzgador austero, centrado, sensible, fuerte y justo; e insistió en que hacer el bien, requiere carácter y sensibilidad, virtudes que toda su vida constató en su progenitor y que formaron su convicción de que esas son las virtudes de la judicatura.
Por iniciativa del Coordinador de la Extensión Regional Nuevo León de la Escuela Federal de Formación Judicial, fueron compartidas anécdotas y vivencias que relatan las enseñanzas que dejó el magistrado que gustaba de la oratoria, la lectura, el derecho y el amor por su familia.
La Ministra Ana Margarita Ríos Farjat recibió una presea en honor a su padre, quien fue ejemplo a seguir por su entrega y compromiso con la Carrera Judicial.
