Los millennials son quienes pasan más tiempo en sus teléfonos, registrando un promedio de 3.7 horas diarias. A medida que la edad de los usuarios aumenta, el tiempo promedio diario frente a la pantalla disminuye
Andrea Casco
El teléfono celular se ha convertido en un dispositivo indispensable en la vida cotidiana, y abarca diferentes aspectos de nuestra existencia.
Un estudio realizado por WhistleOut, un sitio web de comparación y asistencia en planes de telefonía móvil e Internet, reveló que las personas pasan en promedio casi nueve años mirando la pantalla de su celular.
Según el estudio, una persona dedica un poco más de 76 mil 500 horas a su teléfono celular a lo largo de su vida, lo que equivale a 8.74 años. Esto se debe en parte a que la edad promedio para adquirir un teléfono móvil es de 10 años, lo que implica un uso promedio diario de 3.07 horas.
La investigación se llevó a cabo con una muestra de mil personas de diferentes grupos de edad y arrojó tendencias de uso que varían según la generación a la que pertenezca el usuario.
Los millennials son quienes pasan más tiempo en sus teléfonos, registrando un promedio de 3.7 horas diarias. A medida que la edad de los usuarios aumenta, el tiempo promedio diario frente a la pantalla disminuye: la Generación X reporta 3 horas de uso diario del teléfono, mientras que los baby boomers pasan solo 2.5 horas al día mirando sus pantallas.
En cuanto a los usos específicos, las personas adultas mayores indican que utilizan el teléfono principalmente para comunicarse con familiares y mantenerse informados.
Los adultos jóvenes lo emplean como una herramienta fundamental en su agenda laboral, ya sea para comunicarse con sus superiores y colegas, programar citas con clientes o incluso para llevar a cabo ventas de diversos artículos. Por su parte, los más jóvenes refieren que utilizan el teléfono prácticamente en todas sus actividades.
El estudio destaca cómo el teléfono celular se ha convertido en una herramienta esencial en la vida de las personas, influyendo en diferentes aspectos de su rutina diaria y adaptándose a las necesidades y preferencias de cada generación.
