Un grupo de 45 países, miembros de la ONU, exigió ante el Consejo de Derechos Humanos que Venezuela ponga fin a la represión contra opositores y manifestantes.
Asimismo, solicitaron la liberación inmediata e incondicional de los detenidos arbitrariamente.
Entre las naciones que apoyan la declaración están Argentina, Chile, Ecuador y Perú, que también instaron a Venezuela a respetar las normas internacionales de debido proceso.